El otro día ya me decidí llevar el coche al taller para que me revisaran las zapatas traseras porque en la itv me dijeron que había una diferencia del 27% (me quedé a poco de la falta grave).
Las zapatas delanteras ya me las ajustaron los Montoya, pero a ojo, porque no tienen frenómetro (me las dejaron a un 5% que no está nada mal para los años del coche). El problema era que las traseras también se iban pero como se notan mucho menos pues no nos dimos cuenta.
El taller a donde lo llevé fue a Talleres A.Moreno y la verdad es que ha cambiado muchísimo la forma de frenar del coche, la impresión que me da es que frena un 200% más que antes y pisando menos el pedal del freno.
He ido a dicho taller recomendado y por su buena fama, aunque ha habido gente que me ha dicho que tendría que empezar a hacerlo yo (incluso me dieron unas clases teóricas de lo que tendría que hacer), pero creo que iremos poco a poco con estas aventuras, todavía no me veo haciendo ciertas cosas.
El coche poco a poco va cogiendo rodaje, cada vez va mejor y le voy añadiendo alguna piececilla nueva para que vaya quedando lo más nuevo posible, al final termino comprando alguna cosilla casi todos los meses... Es lo que tiene que sea un capricho.
Desde pequeño siempre quise uno, ahora siendo mayor ya he podido hacer realidad mi sueño. Aquí os contaré la vida diaria de mi escarabajo para que tengáis toda la información que he ido recopilando durante estos años y los conocimientos que iré adquiriendo.
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